Algunas de las conclusiones aportadas por el estudio son las siguientes:
- Mejora de la capacidad de los centros canarios de investigación para participar en programas europeos de I+D+i.
- Utilización, por parte de las empresas, de prácticas de recursos humanos de alto compromiso (promoción, evaluación, formación planificada, participación, remuneración variable y contratación indefinida) como determinante de la innovación en productos así como en procesos.
- Impulso de la sociedad de la información y el conocimiento en el ámbito regional al objeto de promover el uso y la actualización de las TIC en el tejido empresarial y en la población en general, así como en la propia Administración Pública.
- Implicación de las Administraciones públicas canarias en el desarrollo de las condiciones que faciliten la producción de software orientado a la micropyme (e.g., creación de uniones temporales entre las empresas productoras de software, facilitar un diálogo permanente entre productores y asociaciones de empresarios, etc.).
- Creación de una imagen corporativa común del sector al objeto de potenciar la marca Canarias en el exterior y promocionarla como innovadora, no sólo a la península sino también al extranjero, y en especial hacia Europa.
- Colaboración tecnológica entre las empresas del sector, así como de éstas con los agentes más vinculados a la innovación como factor crítico para mejorar el potencial innovador y los recursos y capacidades para desarrollar y comercializar las innovaciones.
- Creación de una cultura social que valore la emprendeduría y la inversión en I+D+i como eje del desarrollo regional.
Esperemos que el estudio al menos sirva para aglutinar algunas de nuestras empresas, y que los talentos que existen en nuestra tierra no tengan que continuar emigrando para que se les reconozca su valía.
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